Astaxantina, el antioxidante más potente de la naturaleza

El antioxidante más potente de la naturaleza

Entre otras curiosidades, la Astaxantina es un carotenoide que proporciona su color rosa a especies acuáticas como salmones y crustáceos, tales como cangrejos, langosta o camarones e incluso algunas especies no acuáticas como el flamenco, que debe su flamante color rosa a una dieta a base de fitoplactón y krill, ricos en esta sustancia. Este pigmento se almacena en la piel y tejido graso, proporcionando la coloración característica de estos animales.

Y porque en la naturaleza nada es fruto del azar, se cree, también, que la proeza que realizan los salmones salvajes, remontando el río para volver a su lugar de origen en el curso alto y cumplir con el rito de la reproducción, se debe en gran medida a la resistencia y energía inusual que les proporciona la Astaxantina.

Haemococcus pluvialis, el alga con la mayor concentración de Astanxantina

La naturaleza nos ofrece la mayor concentración de Astaxantina en el alga Haemococcus pluvialis, a la que protege cuando se encuentra sometida a daños provocados por la degradación de su hábitat como agua insuficiente, exposición excesiva al sol o temperatura inadecuada. Bajo condiciones extremas, las microalgas ponen en marcha de forma espontánea un mecanismo natural de autodefensa produciendo Astaxantina, que actúa como escudo protector.

Regenerador de la piel y protección frente a radiaciones UV

Es cierto, que hasta hace pocos años, las vitaminas C, E, algunos carotenos y las vitaminas del grupo B eran las principales fuentes de antioxidantes. Hoy, estudios científicos en animales y humanos demuestran que la Astaxantina tiene 100 veces más capacidad antioxidante que la vitamina E y 10 veces más capacidad que otros carotenos. Posee, además, un efecto antiinflamatorio y de protección ante las radiaciones UV. Resulta ser también un importante regenerador de la piel, ejerciendo un efecto antiaging, gracias a su estructura molecular

Degeneración macular y pérdida de visión relacionada con la edad

Además, según estos estudios, la Astaxantina tiene propiedades antiinflamatorias y ayuda con el dolor asociado como la artritis o el túnel carpiano. Es muy popular entre los corredores de largas distancias y triatletas, que destacan sus virtudes como recuperador tras el ejercicio físico, también como protector solar y mitigador de problemas articulares. Los estudios sobre esta sustancia alcanzan especial relevancia sobre su capacidad para atravesar la barrera retiniana siendo fundamental para prevenir la degeneración macular y la pérdida de la visión relacionada con la edad, las cataratas o el glaucoma.

Asimismo, dichas investigaciones promueven su disposición para atravesar la barrera hematoencefálica que protege las neuronas, permitiendo ampliar su actividad al sistema nervioso central, que es altamente susceptible a la acción de los radicales libres.

Son especialmente relevantes los resultados de la Astaxantina en la regulación de los niveles de colesterol y la buena circulación sanguínea, fortaleciendo también nuestro sistema inmune.

En definitiva, se ha mostrado su efecto en mejora de parámetros antioxidantes, anti inflamatorios, disminución de especies reactivas de oxígeno y mejora de la proporción de lípidos en sangre, mejoría en parámetros oculares, aumento de la resistencia al ejercicio y mejora en la fertilidad masculina. (López Roldán, P., 2012)

Bibliografía